El juez Penal de Garantías, Humberto Otazú no hizo lugar al pedido de libertad ambulatoria y decidió mantener el arresto domiciliario del oficial de policía Aníbal Avezada, imputado por presuntamente extorsionar y cohecho pasivo agravado. Él y otros uniformados de nombres Jorge Darío Duarte y Miguel Ángel Sosa habrían “apretado” a un joven en la jurisdicción de la comisaría 10 Metropolitana de Asunción en junio del 2024 y le habrían pagado 3 millones de guaraníes.
Los mencionados agentes llevaron a la víctima a la comisaría y le exigieron una suma de dinero, bajo la amenaza de iniciar una causa penal en su contra. El joven accedió a entregarles 3 millones de guaraníes, monto que retiró de un cajero automático.
La transacción fue notada por los padres del joven debido a que la cuenta bancaria era conjunta. Ellos decidieron realizar la denuncia pertinente por presunta extorsión.
El fiscal Delfino resaltó que estos agentes policiales, antes de dejar libre al joven, lo hicieron firmar un documento en el que constaba que no había entregado compensación económica alguna al personal. Asimismo, el representante del Ministerio Público indicó que se manejan varios casos de similares.